lunes, 16 de diciembre de 2019

42- VAMPS, HUMANOS Y PANTANOS




Daybreak, el apocalipsis donde los adultos no pintan nada, se han convertido en zombis que solo repiten en bucle la última frase tonta antes de la bomba que lo cambió todo. Parias que van recorriendo el mundo.

Luego tenemos a un chico , Josh que se nos presenta como el héroe de la historia que tiene como meta en reunirse con el amor de su vida. Una obsesión que no dejará de estar en su cabeza durante toda la serie. Además, nos lo contará directamente al espectador usando la cuarta pared y con unos cuantos flashbacks de su vida estudiantil y de como se quedó prendado de su chica. Un amor platónico.

La historia esta contada de una manera fresca, en el sentido de los propios personajes piensan y opinan, como si estuvieran hablando con el espectador. No solo nos hablan sino también nos muestran con gráficos o textos lo que va a pasar a continuación. Al usar este recurso tanto te acabas cansando. El poder descubrir por nosotros mismos lo que va a pasar se pierde, que te lo den ya todo hecho es poco estimulante.  Un poco para introducir, pero no tanto que cansa.

El episodio piloto es muy entretenido y incluso pensamos que el resto de episodios no deben de estar mal.  La realidad es otra, cuanto más avanza la temporada van desinflándose sin ningún control. Llega momentos que hasta te aburren. Cuando crees que la serie no tiene remedio los últimos episodios la vuelven a revivir, recupera la frescura del inicio. Sobretodo el final de temporada te lo salva.

La originalidad del inicio pasa a ser unas tramas plagadas de clichés, personajes que en un principio parecen interesantes acaban siendo de lo mas simplones. El personaje que de verdad tiene mi interés y el mejor esta desarrollado es el de Angélica. Un personaje que pasa de ser una secundaria a ser uno de los más importantes.  Es que mejor está escrito y su relación con Ms Crumble hasta te conmueve.

La intención de la serie es entretener, por eso es mejor no tomársela demasiado en serio. Episodios de relleno para luego rematar bien la temporada. Algo que se esta convirtiendo en habitual en las series de Netflix. 
El final da pie a un nuevo enfoque. Esperemos sepan aprovecharla en la segunda temporada.


Swamp Thing  (La cosa del Pantano)

Una serie que sabes que decidieron cancelarlas sin haberse emitido ni siquiera el episodio piloto.  Que por culpa del alto presupuesto han decidido no continuar.

Viendo la serie completa no puedes evitar preguntarte el porqué han decidido no continuar. Es una serie que no es perfecta pero muy disfrutable. Lo mejor es la estética de la serie. Una puesta en escena original y sorprendente.  La creación de la cosa del pantano como todo lo que le rodea es fantástico.  Es inquietante, terrorífica.  Escenas que disfrutas de verdad. La música quizá algo repetitiva, pero todo lo demás funciona.

La temporada se ve salpicada por la bajada de presupuesto. Se tenía pensado en que tuviera 13 episodios y la condensaron en 10. La trama se resiente por acelerar la historia.

 Lo que te fastidia de verdad es que viendo el final ya sabes que no habrá más. La sorpresa final deja de tener sentido. Más rabia te da porqué otras series sin sentido van teniendo temporadas y esta que su calidad en mejor que la media no ha tenido suerte. Ojalá que algún canal decida algún día volver a revivirla. Que la cosa del pantano pueda volver.

V Wars

La nueva serie de vampiros. Otra serie que tiene una premisa interesante pero que la convierten en predecible y que se va convirtiendo en una serie sin alma.

La premisa de que a causa del cambio climático libera un virus que convierte a los humanos en vampiros tiene su gracia. Convertir a los vampiros en mejores personas que los humanos eso ya es otro tema.  Los diálogos son infumables y las actuaciones son planas que no sabes por donde cogerlas. Que es mejor que otras series que están en el catálogo de Netflix es verdad, pero tampoco es para tirar cohetes.

Los Vamps no molan sino aburren, de que son una especie humana distinta no se lo creen ni ellos.

Escrita por Sandra Barrachina

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