Tres películas que a priori no tienen nada en común. Joker,
Parasite y Terminator Dark fate. Si comienzas a pensar un poco te das cuenta
que en todas comparten un vínculo común , son historias sobre los miedos: al
futuro, la no aceptación , el rechazo ante los demás, sin olvidarnos de la
crítica social.
La vida es dura y para una familia coreana parece que las
cosas en cualquier momento puede ir a mejor. Por una circunstancia, todos en bloque aprovecharan esa
oportunidad para cambiar su situación . Pasar de ser pobre y tener que vivir casi de milagro a
tener la oportunidad de conseguir la felicidad soñada.
Parece una historia muy poco original pero el comportamiento
de cómo afrontar su situación de pobreza es lo que te impacta, como consiguen
su objetivo de una manera tan inesperada. Todo es tan calculado que el
espectador se queda pasmado como pasan los acontecimientos.
Todo viene dado en el deseo de tener una vida mejor, donde
el dinero y una buena casa lo cambiaría todo. La familia es una piña, sorprende
lo bien compenetrados que están todos, pero a pesar de conseguir sus objetivos
no dejan de salir sus miedos ,y que pese a conseguir el objetivo no consiguen
quitarse de encima esa sensación, de que no dejaran de ser esos parásitos que
han conseguido la felicidad de una
manera poco honesta, sino con engaño y manipulación, y lo acabaran pagando y de
que manera.
Piensan que se han salido con la suya pero no habían pensado
en el resto de posibilidades como
veremos en la sorprendente resolución de la película.
Rodada de una manera clásica. Con un montaje que sigue a los
personajes sin estorbar. Con un tono que te deja sentado de lo bien
interpretado que está por parte de
los actores Es cine, pero al mismo tiempo es una obra teatro bien orquestada, es
lo que hace que realmente todo funcione.
Pero sin lugar a dudas, lo que hace que la película se haya convertido
en una de las mejores de año es su guión. El desarrollo de personajes no esta
dejado al azar, pasan tantas cosas que no te da tiempo a aburrirte. Los giros
no están puestos de manera tonta sino con inteligencia y donde toca,
tremendamente efectivos.
Todo bien calculado llegando al clímax final de la
historia que es perfecto. La película perfecta o más bien un guión con
mayúsculas. Matices que da un director que nos envuelve en dos mundos a priori
muy diferentes, ricos y pobres pero los lleva a entrelazar de una manera
magnífica.
EL joker. También viene del mundo de la pobreza. Sobrevivir en
un mundo que lo esta dejando de lado. Un enfermo mental que parece que en
cualquier momento va a explotar. Todo el guión se centra desde el punto de
vista de Arthur Fleck. Nos adentramos en su mente y vemos su sufrimiento. Su
lucha interior y todo lo que conlleva su enfermedad.
Lo más curioso es que pese a ser un personaje de DC Comics
no da la sensación de que estemos presenciando la historia de uno de los
villanos de Batman, por no decir el más importante. Por como se desarrolla la
historia al acabar la película te das cuenta que hemos presenciado dos
nacimientos, el de un posible Joker desatado a un Bruce Wayne que ve como su
vida cambia tras el asesinato de sus padres.
El tono de la película me recuerda a las películas de los
70. Una historia muy cruda y dura donde nos muestra que cualquiera puede
convertirse en Arthur Fleck.
Al igual que en la película coreana aquí el protagonista
quiere alcanzar la felicidad. Pese a sonreír le a la vida con un tic nervioso debido a su
trastorno mental lo único que obtiene es rechazo, humillación y alguna que otra
paliza. Un lucha constante que lo
pone al borde del precipicio y que su solución traerá unas consecuencias
irreversibles.
La actuación de Joaquin Phoenix es sensacional. EL personaje
le aporta de un alma desgarradora que te conmueve. El guión es ambiguo no
aclarando y dejando en el aire dudas, dejando al espectador que tenga su propia
conclusión.
Vemos crítica social y nos hace reflexionar en lo que se ha
convertido la humanidad, incapaz de empatizar con la persona de al lado porque
es más importante el mismo. Es más sencillo estar ciego ante el dolor ajeno
porque así no te afecta y te centras en tu maravilla vida perfecta y llena de
ego.
Por eso la película no te deja indiferente y te hace reflexionar sobre lo
que somos. Tener una enfermedad mental es una lucha diaria que hay que
alimentar con buenos pensamientos y muchos fármacos para hacerle frente.
Sufren y quieren sentirse mejor con el mundo pero no pueden.
Lo desean con todas sus fuerzas.
Arthur lo intenta creando una ilusión de convertirse en cómico
profesional, incluso teniendo alucinaciones viéndose teniendo una relación
normal.
Quiere que le escuchen, no que le abandonen a su suerte. La
sociedad se encarga de rechazarle y darle lo que menos merece, provocando que
se abandone y deje de luchar.
Acciones que cambiara su vida para siempre. ¿Se podía haber evitado?
El espectador tendrá la decisión de decidir la respuesta,
tras el visionado de la película.
La última película Terminator Días oscuros. Es un intento de
nuevo de traernos la continuación de Terminator 2. El personaje central en
aquellas películas era Sarah Connor. Una mujer traumatizada pero donde su fortaleza
ha conseguido lo impensable, cambiar el futuro y salvar el mundo.
Enfrentarse una y otra vez con sus fantasmas pasados que la
han marcado para siempre. Su vida, de pasar de ser una camarera y compartir
piso, a ser la madre del salvador y destructor de Skyned, John Connor. Su
existencia es mantenerlo con vida. Mentalmente debe ser devastador perder tanto
y ver que tus esfuerzos no podrán evitar lo inevitable.
Podrán haber ganado una batalla pero la humanidad siempre se
las arreglara para encontrar otra manera de destruirse.
Pone los pelos de punta pensar que algunas de las
revelaciones de Terminator que en
teoría son ciencia ficción se han hecho realidad o está en proceso de que
sucedan.
La película Terminator Dark Fate intenta continuar la
historia de Sarah pero acaba siendo un personaje secundario que apoya a la
nueva salvadora del mundo, que le falta la garra y que no acaba de interesarte
su historia, porque de alguna manera ya lo has visto en las otras entregas. Que
la misma fórmula ya cansa.
La diferencia,que cuando aparece el personaje de Linda
Hamilton tu atención cambia. Es
una mujer marcada por el dolor y que tiene como meta seguir su lucha contra la
tecnología. Vive cabreada con el mundo. Además Tenemos un nuevo terminator que
no tiene carisma pero que tiene ganas de destruirlo todo.
La historia hace aguas por todos lados. Una pena porqué a
pesar de tener unas escenas de acción muy logradas. La historia que cuenta no
llega a interesarnos. Cambios en personajes que no acabas de entender , que
parecen un chiste malo o que la película ha tenido tantos guionistas que se
nota cuanto más avanza el metraje que hace aguas por todos lados , que no sabes
por donde cogerlo. Entretenida puede serlo pero se ha cargado toda la mitología
creada de un plumazo. Las buenas intenciones están pero el resultado no es el
esperado.
Películas que temen al futuro. Lo encaran a su manera.
Algunos con locura desenfrenada, matando terminators que se van encontrando por
su camino y otros tramando un plan infalible para cambiar su precaria
situación. Las resoluciones no son esperanzadoras, todos han perdido algo
importante y tienen que vivir con ello lo que queda es seguir adelante y no
perder la poca esperanza que les queda.
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